¿Estás cansado de limpiar el suelo y que siga pareciendo que está sucio?
Hay materiales
que por mucho que los limpies siempre dan esa sensación de que no están del todo pulcros. Lo mismo ocurre con las juntas de las baldosas, que se tornan de color más oscuro, pues se van pegando minúsculas partículas de suciedad. También sucede lo mismo con los colores: la suciedad es más visible
en suelos de tonos lisos, por lo que suelen parecer más sucios
que los suelos con colores difuminados. Uno de los materiales más agradecidos y sufridos para suelos
es el pavimento continuo. Lo mejor de él es que es una superficie plana y sin juntas, lo que hace que sea mucho más resistente a la suciedad que los clásicos baldosines con juntas. Y es que no todo es limpiar: también es importante elegir materiales que mantengan la limpieza y el buen estado por más tiempo.
Pavimento continuo de resina epoxi
¿Qué es un pavimento continuo?
Los
pavimentos continuos son un tipo de suelo que
no presenta juntas, permitiendo que toda la superficie carezca de cualquier tipo de límite.
Pavimentos continuos: liso y sin juntas
Como ya comentamos, los
pavimentos continuos son un tipo de
suelo artificial que se caracteriza por
no tener juntas , permitiendo que la superficie sea completamente
lisa y continua . Dan una sensación de
amplitud , por lo que resultan muy
atractivos a la vista. Son prácticos a la vez que decorativos.
En los últimos años se ha generalizado el empleo de estos
pavimentos continuos para interior , aunque hasta hace poco se utilizaban casi por completo en entornos industriales. Ahora, su uso se ha extendido a las viviendas y es
especialmente adecuado a la hora de realizar
una rehabilitación o una reforma . Y como permiten compartir el mismo estilo de pavimento continuo tanto en interior como en exterior, en especial en casas unifamiliares, consiguen una
mayor armonía entre ambas zonas .
Los
pavimentos continuos interiores presentan un
diseño muy atractivo a la vista , pues consiguen un efecto de sensación de
continuidad infinita , y aportan una
sensación de amplitud y de estar en una habitación mucho más grande, característica que se suele buscar en el diseño de interiores.
Internaremos a continuación contarte todo lo que necesitas saber sobre el tema. Pero cuando hablamos de pavimentos continuos ¿no terminas de distinguirlos? ¿No sabes
cuál te conviene más en tu hogar ? Te lo explicamos.
¿Cuáles son los tipos de pavimentos continuos de interior?
Si bien existen
varios tipos de pavimentos continuos, destacaremos solamente alguno de ellos para ofrecer sus principales características específicas.
En forma general, se suelen clasificar en función del material principal de su composición, pudiendo ser a base de hormigones, cementos, resinas o poliuretano. Algunos de los más importantes dentro de la clasificación corresponderían a los siguientes tipos:
1. Pavimentos continuos de hormigón:
- Hormigón pulido
- Mortero autonivelante
- Microcemento
- Cemento pulido
2. Pavimentos continuos sintéticos:
- Resinas autonivelantes epoxi
- Resinas de poliuretano
- Resinas mezcla de epoxi y poliuretano
A continuación te contaremos un poco más sobre cada uno de ellos. Aunque un dato importante
para considerar a la hora de colocar un pavimento continuo
u otro es cuánto mide la estancia con total exactitud. Una buena elección permitirá que el suelo dure casi toda la vida, si se realiza su adecuado mantenimiento.
Tipos de pavimentos continuos de interior
1. El hormigón pulido
Probablemente es el que más conozcas, ya que es el pavimento continuo del que seguro llevas más tiempo oyendo hablar. La diferencia fundamental con el resto de los materiales de los que hablaremos a continuación tiene que ver con
el grosor, ya que en este caso se trata de una
solera de hormigón con un espesor mínimo de unos 8 cm. Es a esta solera que posteriormente se le da un
tratamiento superficial de pulido, para conseguir brillo y un perfecto alisado plano.
Debido a su grosor, es necesario que se coloquen unas juntas de dilatación
, aproximadamente cada 4,5m². Así que siendo puristas, no se trata de un pavimento continuo propiamente dicho.
2. El mortero autonivelante
El mortero autonivelante es un
mortero tradicional, aunque
tratado con aditivos para dotarlo de una mayor fluidez. Sí que es un pavimento continuo sin juntas propiamente dicho, y con un espesor menor, de entre 5 y 15 mm. Se trata de una
evolución del mortero autonivelante tradicional
que se viene utilizando desde hace décadas, con espesores de unos 3 cm, pero que se usaba como soporte para un acabado posterior. Ahora, el
espesor es de menos
de la mitad y se puede
utilizar como acabado final, aunque no tenga la calidad final de otros tipos de pavimentos, como por ejemplo, el microcemento que veremos a continuación.
3. El microcemento
El microcemento es un
revestimiento del tipo “bicapa”:
una mezcla a base de cemento con resinas y polímeros, con una malla en el medio. Puede ser utilizado tanto
para interiores como para exteriores. Su espesor es solo de 1 a 3 mm, y cuenta con una
gran resistencia y flexibilidad.
Se trata de un revestimiento continuo sin juntas. Se aplica de manera artesanal, con llana metálica (o sea que no es autonivelante) . Si bien los acabados lisos
son los más normales, es posible conseguir efectos que imiten la piedra u otros dibujos decorativos. También son capaces de garantizar una gran posibilidad de recubrimiento con unos acabados muy modernos y renovados que cuentan con gran originalidad.
Se pueden colocar en gran variedad de colores y acabados. Por su estructura posee gran resistencia mecánica, así como una fuerte adherencia sobre cualquier tipo de soporte: puede instalarse sobre hormigón, morteros, cerámica, yeso, etc. (cuanto más duro el soporte, mayor resistencia a los golpes), aunque no es recomendable su instalación sobre madera. Es completamente impermeable y puede conseguirse un acabado antideslizante.
La colocación del microcemento es rápida (hasta unos 30m por día) y es de secado relativamente rápido, ya que se puede transitar sobre él tras unas 4 horas después de instalarlo.
Pavimento continuo de
microcemento
4. El cemento pulido
Debido a su nombre, se le suele confundir con el hormigón pulido con el que hemos comenzado, aunque no tiene nada que ver.
En este caso, se trata más bien de una evolución del microcemento, que se compone de cementos seleccionados, arenas finas, resinas y pigmentos naturales. La diferencia principal con el microccemento
es que no necesita malla intermedia
para su aplicación, ya que tiene mayor resistencia a la compresión. Su acabado es aún más uniforme
y el grosor total es de aproximadamente de 2 mm. Se caracteriza por ser un pavimento totalmente continuo, y se pueden conseguir superficies de hasta 500 m² sin juntas de dilatación.
5. Las resinas autonivelantes epoxi
El pavimento de resina epoxi es un
suelo autonivelante, formado por un
polímero termoestable que se endurece
cuando se mezcla con otro agente. Es un material impermeable, con mucha durabilidad y resistencia a la abrasión. Es sencillo de aplicar y proporciona un acabado continuo y liso en diferentes colores. Además, su espesor es muy reducido.
Las resinas tienen color uniforme, como si se tratase de una pintura, y las hay en una gran variedad de colores. Como la pintura, su acabado
también puede ser mate, satinado o brillante. Y como tienen gran resistencia y dureza son los pavimentos perfectos para fábricas y naves industriales.
Como desventaja principal, encontramos que las resinas son muy delicadas en su aplicación, por lo que requiere la aplicación por parte de un buen profesional. Las resinas epoxi presentan también algunas carencias como la poca resistencia al rayado, falta de elasticidad y colores poco estables a la luz.
6.Las resinas de poliuretanos
Aunque son similares, las resinas de poliuretano vienen a suplir las carencias de las resinas epoixi. Los revestimientos de poliuretano ofrecen una
mayor resistencia química,
son más
resistentes
a los rayos de iluminación solar, y su naturaleza es mucho
más elástica.
7. Resinas mezcla epoxi y poliuretano
Actualmente se está utilizando una combinación de ambas resinas, lo que está dando muy buenos resultados.
Estos sistemas híbridos cuentan con varias de las ventajas del tipo epoxi y del poliuretano, a la vez. Para combinar ambas resinas, el procedimiento de colocación comienza primero colocando capas de poliuretano, y se finaliza con capas de pintura epoxi en superficie, dando el acabado superficial que sólo la resina epoxi puede dar en este tipo de pavimentos. La mezcla consigue suelos con gran resistencia a la abrasión y con colores más estables
¿Qué precio tiene el pavimento continuo?
Si bien es cierto que
no presentan precios muy elevados , es posible que las
tarifas de instalación de los pavimentos continuos sean más altas que otros tipos de soluciones. Esto se debe a que este tipo de pavimentos
requiere su instalación in situ, por lo que normalmente es necesario el servicio profesional de una empresa especialista dedicada a ello.
Hay que tener en cuenta que en alguna ocasión también será
necesario realizar alguna reparación de los pavimentos , debido a desperfectos que se le puedan ocasionar u originar.
Dependiendo del tipo de pavimento continuo que se trate, el portal
Cronoshare aporta la siguiente información: el precio de poner un pavimento continuo puede ir
desde 15 €/m2 hasta más de 120 €/m2, aunque la
franja de precios más habitual está entre 30 €/m2 y 50 €/m2.
Para concluir:
Sabemos que no es nada sencillo escoger la mejor opción de pavimento continuo para el interior de tu hogar. Si aún tienes alguna duda, ¿Por qué no nos contactas?
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